La UPC recibe la acreditación de Oficina de Transferencia de Conocimiento

El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (MICIU) ha reconocido, tras un proceso de evaluación, a 111 entidades como Oficinas de Transferencia de Conocimiento. El nuevo registro responde al reciente Real decreto para potenciar las entidades dedicadas a la valorización y transferencia y moderniza el anterior registro de Oficinas de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI).

Diversas unidades y servicios de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) han trabajado en el procedimiento de solicitud que ha hecho posible recibir esta distinción. Esto ha implicado detectar y visibilizar la actividad de la Universidad en el campo de la valorización y la transferencia de tecnologías y conocimiento, así como en aspectos clave para la relación de la Universidad con la sociedad como la divulgación, la promoción universitaria o la participación comunitaria en el proceso de investigación e innovación.

Gracias a esta dedicación, la UPC ha sido reconocida por el Ministerio en todas las cinco funciones básicas de las OTCs:

1. Protección de los resultados de I+D+I (patentes u otras formas de protección)
2. Explotación de resultados de investigación (contratos de transmisión de su uso o titularidad a terceros)
3. Investigación colaborativa entre entidades públicas y privadas / contratación de servicios de I+D+I y tecnológicos
4. Promoción de la creación de entidades basadas en el conocimiento
5. Difusión social del conocimiento (nueva función de las OTCs)

Recibir una acreditación como Oficina de Transferencia de Conocimiento (OTC) proporciona reconocimiento oficial, aumenta la credibilidad de la entidad y facilita el monitoreo por parte del Ministerio de las entidades que se dedican a las tareas de valorización y transferencia de conocimiento e innovación.

¿Qué son las Oficinas de Transferencia de Conocimiento?

Las Oficinas de Transferencia de Conocimiento (OTC) son agentes clave en la conexión entre las entidades generadoras de conocimiento y el sector productivo, como elemento esencial para incrementar las capacidades innovadoras españolas y aumentar su impacto en el crecimiento y el bienestar social.

La actividad de las OTCs abarca desde la detección de los resultados de investigación y su protección legal hasta su comercialización por diferentes vías como licencias de explotación, la investigación colaborativa entre entidades públicas y privadas, la contratación de servicios de I+D+I y tecnológicos, o la creación y/o participación en entidades basadas en el conocimiento. Los datos aportados por las entidades inscritas en el Registro favorecerán el diseño y la elaboración de políticas públicas para impulsar la valorización y la transferencia de conocimiento.

El MICIU trabaja para fortalecer estas entidades y potenciar sus capacidades y su impacto en el Sistema Español de Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTI), a través de la profesionalización de sus recursos, la cooperación entre ellas y con otros agentes del SECTI y la internacionalización de sus actividades.

Del total de entidades inscritas en el Registro de Oficinas de Transferencia de Conocimiento del MICIU, hay 55 universidades, 26 centros tecnológicos y de apoyo a la innovación tecnológica, 11 entidades sanitarias, 7 organismos de I+D regionales, 5 organismos de I+D estatales y 7 entidades de otro tipo.

¿Qué diferencia a las OTCs de las OTRIs?

Las Oficinas de Transferencia de los Resultados de Investigación (OTRIs) y las Oficinas de Transferencia de Conocimiento (OTCs) tienen objetivos similares, pero tienen diferencias en su enfoque y alcance.

Las OTRIs han sido las entidades clásicas dentro del sistema de valorización y transferencia de tecnología en España, actuando como intermediarias entre investigadores y el sector productivo. Se han centrado principalmente en la valorización y la transferencia de los resultados específicos de investigación de universidades y centros de investigación y sus actividades han incluido la protección de la propiedad intelectual, la gestión de patentes, la comercialización de resultados de investigación y la promoción de proyectos colaborativos entre universidades y empresas.

En cambio, las OTCs tienen un enfoque más amplio que no solo incluye la valorización y la transferencia de resultados de investigación sino también la difusión social del conocimiento. Concretamente, los requisitos en esta función incluyen disponer de una o más páginas web orientadas a la difusión social del conocimiento, generar materiales de difusión dirigidos tanto al público general como al público profesional, llevar a cabo actividades de divulgación participadas por personal investigador de la entidad y participar en programas de innovación social o en actividades de ciencia ciudadana.

La creación de las OTCs responde a una nueva normativa que busca potenciar las funciones de transferencia, ampliando su alcance y capacidad de impacto dentro del ecosistema de innovación. Así pues, representan una evolución de las OTRIs, con un enfoque más integral y amplio de la transferencia que incluye el conocimiento y la participación social.